Cortarollos

¡¡Hola, buenas noches!!

¿Cómo va todo? me he enterado de que en España las temperaturas se han metido un buen guantazo, como ya pasó aquí en su momento jejeje así que, abrigaos todos no os vayais a resfriar.

La última vez que escribí algo fue el 3 de diciembre así que... al tema, que hay "bastantes" tonterías que contar.

Tal y como dije la última vez, ese jueves había quedado con Martin para darle unas fotocopias de filosofía que no tenía. Como yo tenía clase toda la mañana (de 09.00 a 13.15, más o menos) quedamos en el descanso de quince minutos que tengo. No apareció. Tampoco es que fuera de vida o muerte, pero bueno, el caso es que se durmió (habíamos quedado a las 11.15...) así que se quedó sin las fotocopias de filosofía... claro que, al final, no ha vuelto a clase de filo, así que sin problemas.

Ese fin de semana fue de lo más tranquilito, eso sí, el sábado me abrigué bien y me fui a pasear tranquilamente al mercadillo de Navidad.

La verdad es que, para ser sábado no es que hubiera excesiva gente. Pero claro, estaba muy nublado y tenía toda la pinta de ir a ponerse a llover. Al final, por suerte, no llovió y pude pasar una mañana y un medio día de lo más amenos.

Como había ido con toda la intención de quedarme a comer me di un par de vueltas por los varios puestos de comida del mercado. Al final compré la comida aquí:

Salía un olorcillo del puesto... ¡olía genial!

Así que, después de hacer la impepinable cola (y ver cómo una mujer mayor se le colaba a un chico, con toda su cara para después volver a colarse varias veces hasta que llegó a la caja). Así que, al final, con el hambre que tenía... y que yo todo lo hago igual ¡¡me compré esta peazo salchicha!!

Me acordé muchísimo de mi tio Jaime, y las historietas que contaban de Alemania mi madre y mi tia Elo.

A parte de jalar un montón, y beber - como no - vino caliente, estuve buscando una cosilla que me había pedido Laia: un dragón amarillo. Que al final encontré. Y mientras daba vueltas por el mercado estuve escuchando también varios coros (tanto de voces blancas, como de gente más mayor) cantando todo tipo de canciones (tanto populares polacas, como villancicos y demás de lo más internacionales y conocidos).

Después de hacer la comprita para Laia, me comí esto... ¡¡camenberg frito!! y hecho a la parrilla allí mismo. Estaba tremendamente bueno, la verdad es que ese dia me cuidé y mucho jeje.

La nota divertida fue cuando estuve viendo (y grabando) a los coros. Mientras cantaba el coro de los niños había un montón de padres - lógicamente - y, tras terminar una canción, vi cómo uno de los niños se adelantaba para cantar una canción como solista (y todo el coro haciéndole... los coros, valga la redundancia). Una mujer que estaba a mi lado empezó a pegarle codazos a otra, supongo que sería su hijo. Empecé a grabar y en vez de sonar una voz blanca, sonó una voz grabe que daba miedo ¡toma sorpresa que nos llevamos todos! un niño que no me llegaría al sobaco con un vozarrón de la leche. Está grabado, a ver si subo a internet todos esos videos para enseñároslos.

Al final Laia se quedó - o se quedará en cuanto la vea - con este dragón amarillo tan majo.

El lunes siguiente (7 de diciembre) me libré de ir a clase por la tarde, y es que como ese mismo viernes íbamos a hacer una visita a Kazimiers (el barrio judio) con el profesor de esa asignatura, el hombre decidió que se "suspendía" la del lunes. Es decir, trasladó la clase de dia, de hora y de sitio. Así que el lunes me dediqué a lavadoras y demás y pegarle un repasito a la habitación. Ama de casa total, me faltaban los rulos.

Lo único fuera de lo "normal" que tuvo ese dia fue que pedí cita por internet para ir a hacerme la foto de la Orla de la universidad. Y parece que fue ayer cuando la empecé... pero bueno, el año que viene más, que me faltan créditos... aunque el año que viene será el último.

Los dos siguientes días no ocurrió gran cosa, para empezar, el martes (8 de diciembre) la profesora de la asignatura del Holocausto nos devolvió el resumen/presentación que le habíamos entregado sobre el trabajo que vamos a hacer en la asignatura. Estaban corregidos, y había anotaciones. En el mio no había mucho, a la profesora le ha gustado mucho mi idea. Además, tengo más tiempo para hacerlo del que pensaba, así que sin prisas pero sin pausa. El miércoles (9 de diciembre) fue dia de estar en casa, hacer cosas de la universidad y... hacer el ganso, pa' qué negarlo. De vez en cuando hay que darse un dia de esos.

El jueves (10 de diciembre) fue de lo más movidito, y a la vez divertido, aunque no todo salió como debería. Como todos los jueves tenía toda la mañana llena de clases. Hablé con el profesor de Hª de la Cultura Polaca, acerca del trabajo y demás, y también me dio fechas exactas para la entrega y estuvimos hablando de lo que quiero hacer y le gustó mucho el tema. He decidido hacerlo sobre la historia del arte de una ciudad entera. Tengo bastante material, y como he barrido "pa' casa" no creo que tenga mucho problema con él. Volví a casa y comí rápido, porque a las 16.30 había quedado otra vez en el centro con Martin.

Estatua-memorial de Adam Mickiewicz, punto de encuentro más que habitual

El caso es que habíamos quedado con más gente para ir a patinar sobre hielo, pero sólo aparecimos nosotros. Así que nos pegamos un pateo del quince y cuando llegamos a la pista de patinaje vimos que otra chica - de la que nunca consigo recordar el nombre, lo siento - estaba esperándonos allí. Pero como ya he dicho hace un "rato", no todo podía salir bien, y es que cuando entramos en la pista (bueno, en el recinto) había unos niños entrenando (hockey sobre hielo). Como nosotros habíamos mirado los horarios en internet de apertura al público, nos acercamos a información a ver qué pasaba.

Lo que pasaba era bien sencillo, habían cambiado los horarios, pero no lo habían hecho en internet también. Así que nos quedamos los tres con tres pares de narices y sin poder patinar. Cabe decir, que todo esto lo descubrimos entre los tres inspeccionando por allí, porque no había nadie en información, sólo un perro atado ladrando mucho...

Así que al final, como ya habíamos salido de casa, y estábamos muy cerca de Kazimiers, fuimos a una cafetería a tomar algo y charrar. Cuando a la chica se o hizo la hora para ir a sus clases de polaco la acompañamos hasta allí, y nosotros nos volvimos al centro. Fuimos a pasear - mientras hablábamos, lógicamente - al mercado de Navidad y al final terminamos cenando allí los dos mano a mano.

La verdad es que lo de patinar sobre hielo nos hacía mucha ilusión, y nos cortó un montón no poder patinar ese dia, pero hemos quedado en - ahora que tenemos los horarios buenos - volver a ir a la pista de hielo para patinar.

Ya el viernes (11 de diciembre) después de la última clase de filosofía (el profesor decidió cancelar la de mañana sabiendo que la gran mayoría de personas de clase no íbamos a estar porque volvemos a nuestros respectivos paises) fui volando - casi, casi - a Kazimiers, para la visita con la clase de Hª de los Judíos en Krakow. Fue una visita muy interesante, vimos calles, sinagogas y cementerios. Tengo que volver a ir por mi cuenta para verlo todo con más tranquilidad y hacer muchas fotos.

El fin de semana lo pasé "encerrada" en casa, pegándome con el trabajo de Cine Polaco. Quería hacer algo más complicado que coger una película y hacer un simple comentario. Así que estuve descansando a ratos y haciendo el trabajo toooodo el fin de semana. Al final, lo terminé el martes de esta semana. Me ha quedado muy bien, de título le he puesto "Polish Science Fiction.Brief essay on the relation between the Literature of science fiction and the Cinema in Poland" que traducido al castellano molondo y lirondo sería algo así como "Ciencia Ficción Polaca. Breve ensayo sobre la relación entre la Literatura de ciencia ficción y el Cine en Polonia". Gracias a Julio que encontré información a cascoporro, porque el fin de semana me volví loca buscando cosas por internet.

El lunes, ya de esta semana, (14 de diciembre) tuve clase por la tarde. El domingo había empezado a caer agua-nieve, y el lunes no había parado... así que cuando salí a la calle me encontré con esto:

Que en principio no es nada, pero claro... lleva con aguanieve sin parar desde ese dia. Así que hoy ya teníamos una capa considerable y en las zonas de mayor tránsito unos barrizales bastante simpáticos (esta mañana he visto varios patinazos).

Iba muy bien abrigada, esos sí, se me olvidaron los guantes... soy así de lista, qué se le va a hacer. Así que cuando llegué a clase, no era capaz de escribir. Eso sí, volví rapidísimo al piso cuando terminó la clase. No tenía ganas de que se me volvieran a congelar las manos. Obviamente, no se me han vuelto a olvidar ningún dia.

El martes (15 de diciembre), después de ir a clase fui a la Galería porque tenía que comprar un par de cosas en Carrefour. Christian se vino conmigo, hicimos las compras pertinentes y comimos juntos. Lo más destacable de la compra fue un candado que me compré para la maleta, de estos de números con código. Cuando llegué a casa cambié el código y lo dejé todo maravilloso de la vida... una hora después, sin yo tocarlo, se había roto ¡él solo!

Así que ayer (miércoles 16 de diciembre) me tocó volver a Carrefour y me lo cambiaron sin problemas. Como era mi dia libre (como todos los miércoles, no tenía clases) me dediqué a hacer la maleta (para ir hoy más desahogada) y a dejar semi-arreglado todo, puse una lavadora, dejé recogidos los libros y demás... vamos, hice un poco de todo.

Esta mañana he ido a clase, poca novedad por esa parte. Cuando hemos salido, nos hemos ido a comer juntos Paula, Christian y yo... muy divertido, todo el rato, pero sobretodo el momentazo de Christian cuando ya nos íbamos, que dirigiéndonos ya a la puerta, se ha chocado con una mesa y casi tira la aceitera, la sal... las camareras se han quedado alucinadas. Paula y yo, obviamente, no hemos podido evitar reirnos.

Aunque la mayor nota de humor ha sido esta tarde. Sobre las cinco y media, cuando ya lo tenía casi todo hecho, me ha dado por revisar los papeles del avión. Yo pensaba - y estaba toda convencida - que mi avión salía a las 08.00 de la mañana del viernes 18 de diciembre (osea, mañana) y por lo tanto iba a llamar al taxista (que por cierto, había conocido el viernes antes cuando me llevó a la visita a Kazimiers) para que estuviera en el piso a las 05.30. Menos mal que me ha dado por mirarlo. Resulta que mi avión ¡¡sale a las 05.30!! imaginaos si hubiera llegado a las 06.00 toda convencida y mi avión hiciera media hora que se hubiera ido... ¡¡mi madre me mata!! (y yo me incho a llorar, todo sea dicho).

Así que a las seis de la tarde he llamado al taxista para quedar con él... me ha costado quince minutos convencerle de que no me daba tiempo si venía a por mí a las 04.30... pero al final lo he conseguido. Esta noche, a las 03.00 estará aquí, y si a las 03.01 no está, llamo a la compañía (tengo todos los teléfonos) y que venga quien sea.

Así que aquí estoy, con todo arreglado/preparado, y en breve me iré a dormir un par de horas. Mañana, estaré en casa dando por saco. Así que la próxima actualización será desde España.

¡Ah! una cosa que se me olvidaba. Las lentejas. El domingo (13 de diciembre) hice lentejas para comer... pero hice tantas que he estado toda la semana comiendo y cenando lentejas ¡¡no quiero ver un plato de lentejas en dos meses por lo menos!! jajajaja.

Y eso es todo, por ahora. Como siempre, más fotos y seguimiento diario por facebook. Y en cuanto tenga un ratito para ponerme al dia, por aquí.

Un beso a todo el mundo, nos vemos en nada.

Iria

PS. Acaban de venir mis compañeros de piso a desearme Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo (porque se han ido de fiesta y ya no los veo hasta enero) ¡¡me encantan estos chicos!!

Una buena caida

¡Buenas noches!

Ya estoy otra vez por aquí para contar mis pocas ocurrencias durante mis últimas semanas en Krakow antes de volver por Navidad (como todo el mundo estará pensando "mira, como el turrón"). Pero que nadie se asuste, en enero estaré por aquí otra vez... ah, y un aviso, en Navidad y Fin de Año el blog no cierra. Porque aunque no esté en Krakow ese tiempo seguirá siendo parte de mi beca Erasmus.

Dentro de dos semanitas (y poco más), exactamente el dia 18, vuelvo a España, así que las actualizaciones serán desde allí, desde Bélgica y Alemania. Ya os contaré mejor más adelante.

Por ahora tengo que volver a hacer resumen de la última semana. El último dia que actualicé fue el 24 del mes pasado (lo escribo como si hubiera pasado una eternidad, pero en realidad, si sacais cuentas son sólo unos días jeje). Ese dia vino Iza a limpiar y la casa da gusto, le falta una pequeña pasadita a la cocina... pero mañana les pegaré un toque a estos dos para que no se descuiden (lo que yo ensucio lo limpio en el momento... a estos de vez en cuando tengo que ponerme en modo madre con ellos).

Esa semana la verdad es que tuvo más bien poco movimiento, clases y demás como siempre y un fin de semana la mar de tranquilito. Con mis paseos por el centro y mirando un par de cosas en las tiendas de la Galeria. Al final compré un termo la mar de majo y apañado, ¡¡y es tan barato!! como Julio y yo haremos en fin de año (y en marzo) bastante kilómetros en coche queríamos comprar un termo para el café. Ya lo tenemos. El que tenía él murió cuando vino a verme en septiembre y se salía el café... así que ya tenemos uno nuevo.

A parte de eso, poca novedad... quiero volver un dia a la Galeria a hacer un par de fotos porque la han decorado muchísimo para Navidad y la verdad es que les ha quedado muy bien.

Esta semana está teniendo algo más de movimiento. El lunes (30 de noviembre) me levanté pronto y terminé el guión (que tenía que entregar al dia siguiente) del trabajo sobre el Holocausto (bueno, en realidad, sobre una obra que trate el Holocausto). Se suponía que teníamos que entregarlo el martes, pero yo creía que por una excursión de otra asignatura no iba a poder ir. Así que el lunes fui a una tutoría y entregué el guión, la profesora se lo leyó por encima y le gustó mucho la idea para el trabajo. Me felicitó por el guión y me dio las gracias (sobre unas 100 veces) por haber ido a la tutoría y entregar el guión antes de tiempo (le había explicado porqué lo había hecho así).

Al final la excursión se dejó para el viernes (11 de diciembre). Así que el martes (01 de diciembre) fui a clase, algo que a la profesora todavía le encantó más. El caso es que esta mujer es muy estricta pero parece que le he caido bien. Nos puso la película Conspiracy de Frank Pierson (2001) con actores de la talla de Kenneth Branagh, Stanley Tucci o Colin Firth.

Dura 96 minutos y es "únicamente" una recreación de la Conferencia de Wannsee, donde los nazis decidieron poner en marcha la llamada "solución final". Para quienes no dominen del todo el inglés, en el cartel de la película pone "Uno de los mayores crímenes de la humanidad se perpetró sólo en una hora. Una reunión. Seis millones de vidas."

La película es muy dura, son las conversaciones de la reunión. Es simplemente una habitación y una conversación... pero fueron 96 minutos de lo más densos y duros. A quien le interese esta parte de la historia de la humanidad le recomiendo la película. Se filmó en Berlín y la BBC forma parte del film. En España la película se renombró como "La solución final", aquí está el cartel:



Eso fue ya este martes, así que ayer, como todos los miércoles son mi dia libre, decidí darme un "lujo" y salí a comer fuera. Tenía intención de comer en la plaza del mercado en el mercadillo de Navidad, pero había niebla y no quería terminar congelada y chopada. Así que me fui a comer a un restaurante en el que había estado un par de veces en septiembre con Julio. Comí muy bien, y mucho, por menos de diez euros. Después me fui al mercadillo a hacer un par de fotos y dar una vuelta.


Esta foto es de las tres de la tarde... ya estaba empezando a anochecer. A las cuatro era completamente de noche.

La verdad es que el mercado ha quedado muy bonito. Está lleno de árboles de Navidad (sin decorar), la iluminación les ha quedado muy bien y las tiendas son completamente distintas unas de otras. Hay casi de todo, pero la gran mayoría son cosas hechas a mano, ya sea para decorar la casa en Navidad, ya sea comida...

En los puestos había cantidades ingentes de peluches y decoración navideña para la casa.

Después de dar un par de vueltas y hacer infinidad de cosas (todas las fotos se pueden ver en mi facebook, como siempre) empecé a fijarme que mucha gente llevaba vasos... total, que con lo curiosa (por no decir cotilla) que soy, cuando pasó por mi lado una chica más bajita que yo me quedé mirando el interior para ver si era lo que yo creía. Y sí, lo era: vino tinto caliente.

Mis padres me habían contado que era muy típico en Alemania, y yo quería probarlo, así que me acerqué a uno de los barriles gigantes donde lo vendían y me compré un vasito... ¡¡está buenísimo!! tienen que echarle algo, porque dudo que simplemente sea vino calentado... y no sé qué será, pero estaba muy bueno. El caso es que cuando me lo había comprado, tal cual me giré para irme me encontré con un chico que se quedó mirándome... ¡¡si íbamos (y vamos) juntos a clase!!

Productos típicos de la zona :D

Después de comprobar que nos acordábamos del nombre del otro (aunque a él le cuesta un poco decir el mio...), cosa bastante rara en mí ya que se me suelen olvidar, Martin (que así se llama) y yo nos fuimos a comprar tabaco (para él, obviamente) y después volvimos con dos amigas suyas a terminarnos el vino (ellos también se habían comprado). Así que terminamos de charreta en medio del mercado una húngara, una americana, un alemán y yo. Aquello era un cachondeo. Al final las chicas tuvieron que irse porque tenían clase, y Martin y yo nos fuimos a una cafetería a tomar un café y a seguir hablando. Coincidimos en las clases de filosofía, y las últimas dos semanas no había venido, así que más o menos le puse al dia y luego nos dedicamos a hablar de todo un poco.

Y así fue como me enteré de dónde narices está en la ciudad la pista de patinaje. Él había ido la semana pasada con unos amigos y dice que está cerca y muy bien, va a pasarme la dirección. Así que la semana que viene ya tengo algo que hacer (o este finde, ya se verá). Es barato y a mí me encanta, Martin me dijo que él se apuntaba y se lo he estado diciendo a más gente... pero parece que prefieren salir a beber. Bueno, me quedo con el patinaje, cuando vaya... haré fotos.

Después fuimos a recoger a las chicas cuando salieron de clase y ellos se fueron a casa de unos amigos y yo a mi piso. Hoy había quedado con él para dejarle el texto de filosofía que no tiene, pero no ha aparecido (a mí me da igual porque había quedado con él en los quince minutos de descanso que tengo entre las dos clases) supongo que ayer se quedaría hasta las tantas en la "fiesta" a la que fueron ayer y se habrá quedado frito.


En Krakow que no falte el dragón ni en Navidad.

A parte de todo eso, me terminé ayer el libro de Dacre Stoker e Ian Holt, "Drácula, el no muerto". La segunda parte oficial del libro de Bram Stoker. Una pasada, me gustó muchísimo. Ahora me he empezado "Hijas y Esposas" de Elisabeth Gaskell (regalo también de Julio... que me regaló hace casi un año y que ya tocaba leérselo). Estoy que no paro de leer, y me encanta.

Un cambio de registro radical en cada libro que me leo, pero con éste me llevo la palma.

Esta mañana me he levantado tarde, es la primera vez que me he dormido desde que he llegado a Krakow. Normalmente salgo como tarde de casa a las 08.10 (cuando las clases empiezan a las 09.00) porque me gusta llegar pronto, es algo que hago incluso en Valencia. Pues me he despertado a las 08.20, y la verdad es que no me he estresado demasiado. Al final sólo he llegado 10 minutos tarde, así que sin problemas.

Las clases bien, como siempre. He hablado con los profesores acerca de los trabajos de sus asignaturas, me han solventado todas las dudas que tenía y ya me he hecho mi calendario de trabajos para que me de tiempo de hacerlo todo. Sin prisa pero sin pausa.

A parte de eso, esta mañana me ha dado por abrigarme más... y es que no sabía yo porque pero intuía que iba a hacer "fresquito". Y no es que las temperaturas hayan caido... ¡¡es que se han metido un guantazo que hace historia!! porque ayer estábamos próximos a los 14º y esta tarde, a las seis, ¡¡estábamos a -2º!! pero bueno, parece que la cosa se ha asentado un poco y ahora estamos a 2º (aunque conforme vaya siendo más tarde, irá bajando otra vez). Las temperaturas han caido, pero bueno, sabiéndolo se va a los sitios más abrigados... lo que significa que habrá que poner dos lavadoras semanales en vez de una (sí, son MUY pocas, pero... sólo soy una).

¡¡Ah, se me olvidaba!! esto fue lo que me compré (al cambio por un euro los dos) para decorar un poco mi habitación por Navidad.

Para darle un poco más de vidilla a la habitación. Mañana toca limpieza general, así que lo pondré mañana.

¿Qué tal por ahí, las temperaturas también se han suicidado como aquí? espero que no sean tan drásticos los cambios y que no hayan muchos costipados. En nada estoy por ahí dando por saco.

Un abrazo enorme a todos,
Iria