Goya en Krakow

¡Buenas tardes-noches!

Y es que aquí a las cuatro de la tarde ya es más que de noche... así que a estas horas ya sería noche jejejeje. Ayer pude ponerme por fin al día con el blog, y claro... a partir de ahí las entradas serán más cortas (menos mal, pensarán las dos o tres personas que me leen, por cierto: gracias, sé quienes sois ¡¡y dónde vivís!! jajajajaja).

Ayer, después de actualizar y ponerme al día, tenía intención de pasar la mañana en casa haciendo cosas, comer y después coger el autobús e irme al museo Narodowe a ver una exposición sobre Goya que tienen hasta este domingo (en principio, porque luego he visto que la dejan hasta el 21).

Tenía intención y lo hice, salvo que, en el último momento, antes de salir de casa me dio por mirar en internet si el museo tenía página web y sus horarios de apertura. Y menos mal que lo hice, porque ayer por la tarde estaba cerrado. Así que después de chafarme yo solita la tarde me quedé en casa leyendo y viendo una serie en el ordenador.

Así que esta mañana me he levantado prontito y he ido al museo. Eso sí, inteligente como soy, cuando he visto que estaba nevando bastante he decidido ir andando. Y no es que esté lejos, pero tampoco es que esté cerca. Así que cuando he llegado estaba cubierta de nieve y mi chaqueta era completamente blanca (cuando normalmente es negra). Un niño pequeño, que estaba esperando para entrar con sus padres en el museo, se me ha quedado mirando y se ha reido cuando me he sacudido de encima la nieve. Luego en el museo me ha saludado cuando me ha vuelto a ver.

Vista del museo desde la parada del autobús, autobús que no he usado.
Museo Narodowe (11.02.10)

La exposición era MUY pequeña, simplemente una estructura montada a parte de las exposiciones permanentes. Ni siquiera tenía una sala propia. Y eran como dos calles, una con los dibujos a tinta y acuarela de Goya, y otra en la salida con el único óleo que tenían.

El caso es que tanto los dibujos como el óleo eran una pasada, y la entrada no ha llegado a un euro... pero vamos, que demasiado bombo y platillo para lo que realmente era. Tengo que ir otro día a visitar las exposiciones permanentes porque tenían buena pinta.

"El sueño de la razón crea monstruos".
Museo Narodowe (11.02.10)

Éste es el dibujo que le daba nombre a la exposición "El sueño de la razón", todo eran dibujos (acuarela y tinta) de la guerra, y el óleo. Se suponía que no se podían hacer fotos, pero he hecho unas cuantas de los dibujos (están en facebook) del óleo no he podido porque estaba en la salida de la exposición y estaba custodiado por dos viejas con cara de perro que no paraban de cotorrear.

Por si a alguien le apetece echarle un ojo, ésta es la web (en inglés) del museo:

Museo Narodowe

Cuando vaya a ver las otras exposiciones ya os diré qué tal.

El resto del día lo he pasado en casa haciendo cosas, y de 18.00 a 19.00 escuchando a Julio en la radio (bueno, lo he escuchado desde internet, pero vamos, que estaba en la radio). Esta tarde nos han dejado en el piso (a Mark y a mí) un paquete enorme de los vecinos del piso de abajo, porque no estaban, así que nos va a tocar investigar cuándo vuelven y dárselo. Hace un ratito ha vuelto Richard de su viaje de una semana tras sus exámenes y hemos estado hablando un poco. Y dentro de un rato me tocará hacer la cena.

Este fin de semana se presenta de encierro, porque quiero terminar para el lunes el último trabajo que me falta... a ver si así puedo dedicarme a otras cosas hasta marzo. Que por cierto, menos de un mes y tendré por aquí a Laia y Tefi... eso sí que va a ser digno de contar.

¿Qué tal por ahí, todo bien? espero que sí :)

¡Un abrazo enorme!
Iria


Paso a paso (III) De vuelta a Krakow

¡Buenos días!

Después de las dos entradas anteriores, éstas que siguen (nuestra vuelta a Krakow y mi vuelta a la "rutina") son bastante menos densas... lógicamente. Aún así, hubo un par de cosas que comentar...

La última entrada terminaba con nuestra llegada a Krakow. Lógicamente el día siguiente lo pasamos dormitando y ganseando, como era miércoles yo no tenía clase, así que no hicimos nada en especial. El jueves (día 7 de enero) yo retomé las clases, así que a partir de ese día llevábamos una especie de rutina bastante maja. Yo iba a clase mientras Julio ganseaba en el piso, y a la hora de comer - cuando yo llegaba - la comida ya estaba hecha. Por las tardes salíamos a dar una vuelta, o nos quedábamos viendo alguna película.

Y es que, si algo hay que destacar de esos días fue el tiempo, el día 9 (sábado) teníamos intención de ir a Sandomierz (ir y volver el mismo día) pero salió mal tiempo y no pudimos ir. Esa noche, cuando nos fuimos a dormir, no caía ni un copo de nieve, y a la mañana siguiente cuando nos levantamos...

La noche antes, cuando nos acostamos, no había nieve. Esto fue nada más levantarnos.
(10.01.10)

No se veía ni la carretera ni las aceras... los coches, por cierto, están subidos en la acera.

Retomando un poco lo que hicimos ese fin de semana, entre el viernes y el sábado nos dimos un par de vueltas por la Galería buscando un exprimidor, pero nada, no hubo manera... así que al final el sábado hicimos la compra y nos fuimos al piso, con el temporal que había no pudimos ir a ningún sitio.

El domingo (10 de enero), nos levantamos tarde y no salimos en todo el día de casa. A parte de que seguía nevando sin parar (como se ve en la foto) ese día hacía un año que Julio y yo empezamos a salir. Así que casi a medio día nos metimos en la cocina y - yo de pinche y Julio de cocinero - hicimos pollo al limón para comer. Estaba para morirse de bueno, además, nos habíamos traido una señora botella de vino tinto que nos bebimos entre la comida y la cena. Así que ese día fue de estar en el piso más que tranquilamente.

Al día siguiente, por la mañana, nos dedicamos a lavadoras y limpieza de la habitación (que la teníamos hecha un desastre), por la tarde yo fui a clase. El martes (12 de enero) Julio me recogió de clase y fuimos a dar una vuelta, me compré el anuario de la universidad (obviamente para el 2010) y volvimos al piso para comer.

Como el miércoles (13 de enero) yo no tenía clase, y Iza venía a cobrarnos el alquiler sobre las 16.00, decidimos pasar la mañana en el museo de la universidad.

Julio durante la visita al museo, en la biblioteca. Museo de la UJ.
(13.01.10)

Nos pasamos toda la mañana en el museo, bueno... gran parte de la mañana. El museo tiene infinidad de salas, y en algunas se pueden hacer fotos, eso sí, una vez vas a llegar al tesoro de la colección no te vuelven a dejar hacer fotos.

Junto a un reloj de época Barroca. La gracia, todos los profes de la Uni al inicio de curso pasan por delante de él. Es uno de los pocos en el mundo (de esa época) que puede interpretar melodías gracias a unas clavijas.
(13.01.10)

Después de terminar la visita, que era guiada primero por una chica y luego por un chico (ambos hablaban en inglés) fuimos a comer. No nos dimos cuenta y volvimos al piso un poco tarde (sobre las 16.20) pero Iza todavía no había llegado. Todavía tardó cinco minutos. Así que le pagué el alquiler y demás cosas y cuando se fue nos bajamos a limpiar un poco el coche (que debajo de tanta nieve ya ni se veía). Lo limpiamos y lo cambiamos de sitio, porque a su alrededor se estaba formando una capa de hielo bastante considerable... anda que no nos costó sacarlo.

Esa noche, después de cenar, ducharnos y demás... nos dimos cuenta de que internet no funcionaba. Algo que de normal me hubiera dado igual (ya que habiéndole pagado a Iza esa tarde, paga las facturas y en nada vuelven a poner inet... ya nos había pasado antes), pero es que al día siguiente tenía que terminar y mandar un trabajo via mail. El día de la entrega, jueves 14 de enero, tuve clase durante toda la mañana, por la tarde todavía no habían arreglado internet, así que - como Julio también tenía que hacer cosas de la universidad y también necesitaba internet - terminamos en la Galería con los ordenadores. Pude entregar el trabajo, Julio se descargó un par de cosas que necesitaba y después de cenar algo allí volvimos al piso.

El viernes (15 de enero) era el preestreno de la película nueva de Sherlock Holmes.

Así que tras mucho investigar, encontramos un cine donde ponen las películas en versión original con subtítulos en polaco (por si nos perdíamos en los diálogos). Así que salimos a cenar y luego fuimos al cine. Nos enteramos de toda la película, aunque a veces teníamos que afinar mucho el oido ya que Sherlock hablaba muy rápido y para el cuello de la camisa. La película, nos encantó.

El fin de semana fue de trabajos (de Julio) para la universidad, y de maletas. El lunes (18 de enero) Julio salía hacia España. Además, el lunes por la mañana yo tenía una excursión con una de mis clases (la de historia de los judíos en Krakow). Pero no pasó ninguna de las dos cosas.

El lunes por la mañana yo tenía que estar a las 11.00 en una sinagoga de Kazimierz, así que pensamos que lo mejor era que Julio me dejara allí con el coche y después se fuera directamente. Mientras yo terminaba de hacer un par de cosas, Julio empezó a bajar las maletas y los trastos al coche... cuando llegó el coche no estaba. No voy a hacer toda la explicación del día porque fue un absoluto martirio, el resumen de la historia es que nos pasamos la mañana (y parte de la tarde) en comisaría. Nos habían robado el coche, lo más seguro es que fuera la mafia rusa, así que podíamos despedirnos de él.

La policía no fue excesivamente amable (salvo un chico), encima no tenía seguro antirobo, lo único bueno... que la agencia del seguro le pagaba el billete de vuelta en avión a Julio. Así que al final volvió el miércoles de esa misma semana (20 de enero). Como era miércoles le acompañé hasta el aeropuerto, y en cuanto se fue volví al centro en autobús, comí en la Galería y compré unas flores de plástico para ponerlas en la botella de vino que nos habíamos bebido el día 10.

Chorradas varias. Así quedó la botella de vino... ahora forma parte de la decoración de la habitación.
(20.01.10)

Lo único interesante que pasó el resto de la semana pasó al día siguiente, en Cine Polaco Contemporaneo I me pusieron un 10, la única buena noticia en mucho tiempo.

El martes 26, de enero, fue la última clase del Holocausto. Así que fuimos al antiguo ghetto de Krakow, a la fábrica de Schindler y a un par de sitios más dejándonos casi la vida en el intento. Ya que ese día estábamos a -20º en el momento que menos frío hizo de todo el día. El Vístula (cuando lo crucé desde el tranvia) ¡¡estaba congelado!! y os aseguro que no es un río precisamente pequeño. Por suerte conseguimos sobrevivir, aunque una de las erasmus españolas se calló y se hizo tanto daño que tuvo que abandonar la excursión.

Al día siguiente me pasó algo bastante gracioso, por la tarde bajé a la tienda que hay justo debajo del piso y mientras iba a pagar entró un chico corriendo, cogió una caja de condones casi sin mirarla y haciendo un montón de movimientos extraños (parecía que se estaba meando mucho, pero dudo que fuera eso jajaja) le pidió a la cajera que le cobrara. Dejé que se "colara" y una vez hubo pagado salió corriendo como alma que lleva el diablo. La cajera y yo casi nos morimos de la risa. Fue el momentazo de la semana.

El jueves, 28 de enero, me pasé la tarde haciendo manualidades... me hice un bolso de mano, la mar de apañado y mono. Por cuatro duros me quedó súper apañado, y además estuve entretenida un buen rato.


Éste es el exterior

Y éste el interior con el monedero a juego.

El viernes, 29 de enero, tuve la última clase de Filosofía Moderna. A parte de ser muy divertida, nos habló del segundo cuadrimestre, y nos puso las notas. Un 10, Matrícula de Honor. Tengo que mirar a ver si me la convalidan cuando vuelva a Valencia. Pero aunque no lo hagan, por lo menos sé que la he conseguido. Y estoy muy orgullosa de ello.

El sábado por la tarde fui a la Galería a darme una vuelta, y en un ataque de locura momentanea me compré un pez. Estuve muchísimo rato en la tienda dando un montón de explicaciones y demás, el chico pareció atenderme muy bien y al final volví con Enero al piso.

Éste era Enero en su primer día en el piso.
(30.01.10)

Tal y como he hecho antes con el tema del coche, voy a resumir. Dos días después Enero se encontraba fatal, me lo habían vendido como un pez de agua fría y - después de pasarnos Julio y yo una noche buscando cosas por internet - vimos que no, que era un Betta, y que es un pez MUY delicado en cuanto al agua y la comida. Lo mantuve lo mejor que pude, y la mañana del día 1 lo llevé a la tienda. Monté el pollo del siglo, el chico no sabía dónde meterse, apareció hasta la jefa. Lo importante, Enero se salvó. A parte de todo lo anterior, me lo habían vendido enfermo. La jefa le montó el pollo del siglo al chico, curó y puso en otro sitio a Enero (que lo dejó de muestra) y me dió la opción de darme otro pez. Le di las gracias y me negué, así que me devolvieron el dinero.

Con ese dinero hice la compra, cuando volví a casa tenía un paquete que me había enviado mi madre ¡¡con avecren y especias para la pasta!! así que ese día hice pasta. El resto de la semana, pasada, fue bastante tranquilo, las clases ya se habían terminado (y hasta marzo no vuelven a empezar). Iza vino a limpiar el piso el martes, el miércoles quedé con Natalia y fuimos a la biblioteca de historia. Y el fin de semana me lo he pasado terminando el trabajo de Historia de la Cultura Polaca.

Este lunes, 8 de febrero, imprimí los trabajos (el mio y el de Natalia) después de recibir una llamada suya diciendo que se iba y que no sabía cuándo volvería. Y ayer me pasé toda la santa mañana esperando al profesor de la asignatura en la puerta de su despacho. No apareció en sus horas de tutoría. Así que me toca mandarle mail para quedar con él la semana que viene, a ver si se digna a aparecer. En cuanto a trabajos, sólo me queda terminar uno, que quiero entregar la semana que viene. Así hasta marzo sólo tendré que estar atenta cuando salgan las clases a las que me quiero matricular. Es decir, vuelve a tocar hacer papeleo.

Esta tarde quiero ver una exposición de Goya que hay en un museo cerca del piso. Espero que queden entradas... por lo demás, comentar que dentro de un mes (menos un día) llegan Laia y Estefi, que ya tengo ganas de tenerlas por aquí liándola. Y Julio ya vuelve a tener billete para venir a verme... sólo me falta que otra persona me confirme su visita. Así que a partir de marzo no voy a parar.

¿Qué tal por ahí, el tiempo, la familia, el trabajo, las clases... todo bien? espero que sí, yo por fin me he puesto al día con esto ¡¡que ya era hora!! y a partir de hoy, más aventuras en cuanto ocurran.

Un abrazo,
Iria